Entrevista a Leopoldo Pacheco

El hombre detrás del villano.

Desde Brasil, el actor explica la maldad del ruin personaje que le tocó interpretar y analiza el fenómeno que provoca la teleserie. “Lo que justifica su locura es el amor que siente por Isaura”, asegura. El actor brasileño Leopoldo Pacheco (45) se escucha somnoliento al otro lado del teléfono. Pero cuando escucha que en Chile, Leoncio, el ruin villano al que le dio vida en la nueva versión de “La esclava Isaura”, es casi más famoso que Pelé, suelta un “qué locuuura”.

Aunque la serie ya fue un fenómeno en su país, este paulista todavía no logra dimensionar el furor que está causando en otras latitudes su mirada penetrante e infinita maldad (ha abofeteado, empujado, mechoneado, arrastrado a Isaura, la mujer que ama, pero a la que no puede tener).

“ Me acuerdo que cuando vi la película Relaciones peligrosas quedé impresionado con el personaje del villano porque uno se identifica con esa maldad, sientes un gusto y un placer por la venganza. Es el gustito de la maldad porque como tú no puedes hacer tanto mal, te sientes realizado a través del villano. Entonces claro que te llama mucho la atención Leoncio, que es un hombre bello que además tiene una gran pasión”, reflexiona el también director y vestuarista. “La verdad es que la televisión para mí todavía es algo muy nuevo. Mi familia quedó muy impresionada, y yo también, cuando Herval (Rossano, director de Isaura) me llamó para hacer a Leoncio. Cuando empecé a hacerlo me sentí muy bien, fue tan fácil, tan agradable, que hasta me relajé. Adoré a Leoncio”, agrega, y recuerda que cuando se estrenó Isaura en Brasil, Federico, su hijo de 11 años “sintió miedo” al ver al iracundo y obseso hombre en que se había transformado su querendón padre.

Foto: Leopoldo y su esposa Bel.

-¿Alguna vez se te ha salido el Leoncio con Bel, tu mujer? -(Risas). La verdad es que no tengo absolutamente nada de Leoncio, soy bien tranquilo, soy un hombre de paz. Me acuerdo que a mi hijo siempre lo paraba la gente en la calle y le decían “tu papá es malo, malo, muy malo”. Y él les explicaba “noo, ese no es mi papá, es Leoncio”.

Después, mi hijo estaba tan saturado de que lo molestaran en la calle que cuando se le acercaba la gente les decía “sí, mi papá es malo, muy malo, me pega a mí, le pega a mi mamá, es terrible”. En verdad yo encuentro que Leoncio es el villano más grande de la historia de las teleseries brasileñas, pero no tiene nada que ver conmigo. -Pero tiene que haber sido fuerte ser tan malo.

¿Cómo lo pasaste en las grabaciones de Isaura? -Nos reímos mucho. Primero, Leoncio era un personaje tan radical en su locura, tan de extremos, que se torna divertido hacerlo. Yo me reía mucho de la situación, pero de pronto había escenas muy fuertes que nos emocionaban a todos: cuando me tocaba tratar mal a los actores negros de más edad. Eso me conmovía mucho, pero la mayor parte del tiempo todas las locuras de Leoncio fueron una gran diversión para mí. Salía contento del estudio.

-¿Leoncio se arrepiente alguna vez de ser tan ruin con Isaura? ¿Cómo se explica tanta maldad? -No. Lo que justifica la locura de Leoncio es el amor que siente por Isaura. Él justifica todo lo que hace por amor, un sentimiento tan grande, por eso finalmente Leoncio es un loco que tiene permitido hacer todo lo que quiera.

-De haber podido, ¿qué le habrías cambiado a la teleserie? -(Piensa), jajajá. Hubiera resuelto pronto el problema haciendo que Isaura se entregara de inmediato a Leoncio, jajajá, no coloques eso en el diario por el amor de Dios, jajajá.

-En Chile, Leoncio arrasó. Las mujeres se volvieron locas por él. -Jajajá, qué locura. Pero yo estoy casado hace 25 años.

-¿Por qué crees que resulta tan atractivo para las chicas?

-Porque a toda mujer, en el fondo, le gusta un canalla. Y Leoncio es un gran canalla, es un hombre muy seductor que sabe como llevar a una mujer, cómo seducir a una mujer, y ese es su gran atractivo.

-¿Qué villano te gusta? -Las veces que mi hijo me invita al cine, he ido a ver “Batman” y “El hombre araña” porque siempre me encantaron los villanos de las historietas, me divierten. Jack Nicholson como “el Pingüino”, y todos esos actores que hacen de villanos, realmente son personas maravillosas que hacen personajes encantadores. “Adoro a Bianca” Leopoldo no se ha juntado con Bianca Rinaldi (Isaura) luego de que ella estuvo en Chile, el verano pasado: “No me ha contado lo que pasa allá con la teleserie, es que como yo estoy en (canal) O’ Globo y ella en (canal) Record, no coincidimos”.

-¿Se hicieron amigos con Bianca Rinaldi durante las grabaciones? -Mucho, yo la adoro. Es una persona muy especial. Fue un placer enorme trabajar con ella, la he extrañado mucho.

-¿Cuándo vienes a Chile? -Estoy terminando la teleserie “Un solo corazón”, que es un gran suceso en Brasil. Pero apenas tenga un tiempo me daría mucho placer conocer Chile, me imagino llegando en barco. Quiero comer centolla y tomarme un buen vino. El personaje que todos querían hacer Leopoldo Pacheco es un destacado actor de teatro. De hecho cuando en el 2002 le tocó interpretar al canalla que atormenta a la esclava blanca estaba haciendo la obra “Pólvora y poesía”, donde interpretaba al poeta francés Paul Verlaine. “Yo tengo una carrera muy sólida, toda mi historia la he construido en el teatro. Soy vestuarista, director, escenógrafo, actor y he ganado premios con todo eso”, cuenta.

-¿Cómo consigue el papel de Leoncio? -Desde el 81’ al 85’ trabajé en una obra con Mayara (Magri, que interpreta a la Condesa Tomasia, la gran aliada de la esclava en la telenovela). Ella era contemporánea mía en la escuela de Artes Dramáticas y se casó con Herval (Rossano, director de Isaura). Cuando estaba la producción de Isaura, ella le habló mucho a Herval de mí, le dijo que yo tenía que ser Leoncio. Y Herval le creyó que yo era el indicado.

-Me imagino que a muchos actores les hubiera gustado ocupar tu lugar. -Sí. Cuando Herval me llamó, encontré curioso que tantos actores adoraran hacer el personaje. Yo fui con tanta voluntad a hacer a Leoncio que Rubens de Falco, que hizo el primer Leoncio y ahora es mi padre, quedó muy orgulloso y me dijo que yo era un actor muy impresionante, que tengo otra forma de actuar para hacer más moderno al personaje.