Capítulo 42

El señor Chico sugiere que haga poner los grilletes a Isaura y que la posea. Leoncio dice que comenzará a doblegar la voluntad de Isaura mediante trabajos forzados. Gabriel le dice al doctor Diego que no siente sus piernas y le pregunta a Bernardo que fue lo que le pasó. Leoncio ve a Rosa vestida de señorita y la desea. Luego manda a sus hombres a traerla y se la lleva a la hacienda. Allí le propone ser la señora de la casa. Rosa acepta y ambos van a tener sexo en la cama de Malvina. Rosa se regodea pensando en la cara que pondría Malvina. Miguel avisa a la familia Cuña que Rosa fue arrebatada por los secuaces de Leoncio. El Coronel estalla. Rosa va derechito a la celda de Isaura y presume de su nueva vida de señorita. Isaura se alegra de verla bien vestida pero Rosa descarga todo su odio y resentimiento diciéndole que ella se merece lo que está pasando. Leoncio saca a Isaura de los pelos y la lleva a hilar pidiendo a Rosa que la vigile. La perversa Rosa se burla, y cuando Isaura desfallece de sed y hambre le pide que le de agua, la maldita Rosa se sirve de un vaso y vuelca el agua en su cara. Raimundo siente pena y le dice a Rosa que es una malvada. La odiosa Rosa lo amenaza con contarle a su hombre, el señor Leoncio que él pretende ayudar a la esclava. El Cnel vuelve a estallar cuando se entera que Leoncio pide 400 mil reales por Rosa a cambio de que quede saldada la cuenta, luego le da la mala noticia a Helena de que Gabriel fue baleado. Helena le ruega que vaya por noticias suyas. Rosa se pavonea delante de Leoncio con aires de grandeza comparándose con Isaura. Esto provoca la ira del crápula quien le ordena que se saque sus ropas de señorita y vuelva a la barraca. Rosa suplica que no la golpee pero Leoncio muere por hacerlo. Rosa venenosa ojalá vayas al tronco.